La última semana de Capítulo tiene como finalidad trabajar las diferentes propuestas que llegaron al Capítulo general y algunos temas relacionados con nuestras Constituciones.
Muchas horas de lectura, reflexión, diálogo, de consensuar significados e intentar expresar de la mejor forma lo que vamos compartiendo. Aparentemente es un trabajo más árido, pero en estos días agradecemos que:
- Dios nos va mostrando el camino para avanzar como Compañía, como Familia teresiana.
- Nuestras Constituciones nos siguen iluminando y llenando de sentido, y nos llevan a reconocer como un don, el haber sido llamadas a seguir a Jesús como teresianas.
- Es un regalo poder celebrar la Eucaristía juntas y agradecer y ofrecer el trabajo de cada día a Jesús para que lo convierta en bendición
- Orar y compartir la oración nos ilumina cada jornada y nos hace vivir con sentido y profundidad todo este tiempo.
- Compartir y construir juntas, desde lo que somos cada una, nos ayuda a reconocer la riqueza de la diversidad.
El Capítulo finaliza, o mejor dicho, termina una etapa más del camino como Compañía; tenemos la certeza de que lo que estamos viviendo es una página más de la historia, una página a la que hemos llegado después de mucha vida, una página a la que sucederán otras muchas. En la que ahora estamos escribiendo van quedando grabadas certezas y caminos para seguir adelante, porque como dicen nuestras Constituciones, “El Espíritu sigue impulsando la vida de nuestra familia religiosa y su despliegue en el tiempo” Artículo 1.